Reflexiones

EL NO PUDO ESTAR AHÍ.

 

El no pudo estar ahí

el día que ella partió

y nunca se ha perdonado

y no se perdonará

el haberla abandonado.

Muchas millas de por medio

y una triste decisión

hacen que llore en silencio

por quien fue su primer amor.

Mientras cruzaba el desierto

buscando un mejor futuro

sólo en ella él pensaba

era su fuerza y motor.

Ella saciaba su sed

aliviaba su dolor.

Era tan joven y cegado

por el sueño americano

partió sólo enfocado

en los dólares malditos.

No sabía que era tan cruel

abandonar lo querido

abandonar sin dolor.

Y después de trece años

porque Dios lo quiere así

aún no encuentra el consuelo

y si se mira al espejo

no contiene el llanto roto

se le desgarra la vida

se remueven las entrañas

y es que su querida abuela

aún le va haciendo falta.

Y ya conoce el amor

y hasta ya ha creado vida

pero el amor de una abuela

no tiene comparación.

Y no pudo despedirla

ni decirle hasta siempre

por eso aún la llora

la llorará cada día

porque no se ha perdonado

el haberla abandonado.


Yaneli Morales

PD…En Memoria a Gregoria Santos Martínez