Hace mucho tiempo la ventana no se abre, aún así puedo escuchar al viento con sus cantos y a la lluvia repartiendo vida.
Por mucho la ventana supo de todos mis secretos mas no me dejaba dormir.
Me impulsaba a correr tras la luna y aullarle a cuanto gato se acercase.
Era una relación romántica, a su vez tóxica.
Me recostaba a su derecha, la melancolía me ganaba confiando en su silencio.
Pero no todo lo que te solapa te hace feliz.
A ratos hay que mirarse, por dentro, sin miedos, sin dirección pero constante.
A ratos hay que desatarse sin lamentos.
No es lo que se pierde en el intento, es lo que no se intenta por miedo a perder.
Me sonríe, sabe más de mí que yo de ella. No es tan inmóvil como parece.
Me seduce a abrirla, sabe que no me negaré a disfrutar de un bello atardecer.
Esta vez bajo la cortina.
No peleo batallas en las que sé que voy a perder.
En un mundo de cuerdos quiero ser la loca que solo confiaba en mi ventana, la de mi habitación.
En un mundo de locos quiero que mi ventana guarde mis secretos.
Yaneli Morales
http://www.yanelimorales.com
En un mundo de locos
Yaneli Morales 