Entre más le quería, más rápido le perdía.
Eufemismo, nunca le tuve.
No quererse es pecado, me condeno,
a la hoguera de otros brazos,
al calor de los míos.
Has llegado tarde,
ahora sólo podrás ver mis labios carnosos,
anunciar tu despedida.
¿Quieres ver cómo sangra la herida?,
has llegado tarde.
He aprendido a sumergirme,
en lo que no duele, en lo que me da vida.
Has llegado tarde,
soy jinete galopando en otros lares
soy danza del vientre sin sabor a ti.
Yaneli Morales.