Es más difícil pero por qué en vez de llamar a las personas envidiosas no intentamos acercarnos y lograr que esas personas sean igual o mejor.
La envidia es admiración,eso ya se sabe.
En gratitud a esa admiración deberíamos intentarlo y me incluyo.
En gratitud porque de la envidia y de los enemigos; como alguien bien me enseñó, de ellos sacamos lo mejor de nosotros y ellos nos ayudan a encontrar el camino.
Es sólo una reflexión para El Alma.
Recuerden que en tormenta se encuentran las lecciones que conducen a la calma.