Hace algún tiempo alguien emigró a los Estados Unidos y como en todo gran cambio pues se engrandece el llanto,la duda,la confusión. Pero todos sabíamos que él podía. Era cuestión de tiempo y adaptación. Se le estaba explicando una serie de cosas y yo al verle aturdido le digo
-No te preocupes que ahora todo te parece raro y no vas a entender nada.Dale tiempo al tiempo.
Me contestó, -Me crees tan imbécil.
Yo callé y me retiré. Y no le creo imbécil pero si creo que en vez de responder así tendría que haber prestado atención y darme un abrazo.Yo sólo pretendía que se sintiera bien.
El mundo no está lleno de malas intenciones!.
Yaneli Morales.